Soy Sara Duval, una madurita de 40 que después de años de matrimonio aburrido y soso… Decidí divorciarme y empezar a «no decir que NO a nada». Bueno, pues resulta que mi hijo se trae a su amiguete a estudiar y contar batallitas… Puede que la Sara Duval de antaño, ni prestase atención a lo que se traen entre manos, pero la de ahora… Es otra cosa, amigos… Así que sí, he puesto la oreja en la puerta en más de una ocasión y me he puesto CACHONDA oyendo como el amigo de mi hijo presume de POLLÓN y de como se ha follado a tal o cual chica en la discoteca, y yo… ¡Estoy desatada!, ¿Qué queréis que os diga? Entonces es cuando he pensado en lo PERRÍSIMA que me pondría enviar una cámara oculta a la plataforma con la que más me he masturbado viendo como las mamis (como yo) dan lecciones de sexo a los jovencitos ;) Así que sí. Me he decidido, ¡voy a intentar follarme al amiguito de mi hijo! Y es que últimamente viene incluso a comer así por las buenas (También, reconozco que he ido creando esa confianza…) Hoy creo que viene, y pasará un rato hasta que llegue mi hijo, así que de aquí no pasa. Este chico necesita una madurita que le guíe, y yo necesito empotrarme a un yogurín que lo tenga todo en su sitio.