Carolina Lorca llega a nosotros para una prueba que a que no sabe en qué va a consistir. ¡Solo sabe que no la va a olvidar! Sin contarle nada, la hacemos llegar a nuestro estudio para que contemple una serie de falos de goma y nos diga claramente que «le gustan los pequeñitos, que esos gordos no sabría por dónde cogerlos». Y ojo, no bromea, esta chica apenas sabe cómo masturbarse con un dildo. Lo que decimos, ¡La chica perfecta! Le vendamos los ojos y hacemos pasar a Jesús y su RABO INHUMANAMENTE GRANDE. Al principio Carolina Lorca juega con él, pero pronto se huele lo que le viene encima, ¡Y menuda le viene encima! Es quitarse la venda, ver esa polla y casi salir corriendo… «Pero eso… ¿Me va a caber en el coño?» Tíos, es que ¡Apenas le cabe en la boca! A pesar de ello, la chica se esfuerza en intentar comerse ese rabo que no le cabe, y al fin llega la hora de la verdad: La hora del PLACER para esta joven que no sabía dónde se había metido! La prueba será dura para Carolina Lorca, pero después de un rato… ¡Vedlo vosotros mismos! Algo nos dice que esta joven ya no va a pensar en otra cosa más que en rabos negros el resto de su vida ;-P
